Por: Redacción /
Sinembargo.mx
Este
jueves 3 de enero termina el capítulo más oscuro en la historia de las dependencias
de seguridad en México…
Desde
hoy deja de existir la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal, luego que
el Poder Ejecutivo, a cargo de Enrique Peña Nieto, publicara ayer la reforma a
la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal que transfiere las
facultades en esta materia a la Secretaría de Gobernación (Segob)…
Aunque
aún no queda claro qué unidades, subsecretarías, direcciones generales y
órganos desconcentrados de la SSP sobrevivirán en la Segob, que ahora comanda
Miguel Ángel Osorio Chong, pues antes será necesario que el Presidente Peña
Nieto, modifique el Reglamento Interior, el asunto está en marcha y la ley le
otorga un plazo de 90 días naturales.
Más
allá de los trámites legales y administrativos que están por venir, lo
relevante de la desaparición de la SSP es el mensaje político: se da fin al
pilar de la guerra de Felipe Calderón Hinojosa, contra el crimen organizado,
que fue planeada del brazo de quien fuera titular de esa dependencia y
secretario intocable del sexenio pasado: Genaro García Luna.
Ambos
defendieron a capa y espada y con desplantes incluso, una estrategia que es
considerada por organizaciones defensoras de los derechos humanos –mexicanas y
extranjeras– como una verdadera tragedia humanitaria: más de 100 mil muertos,
unos 60 mil desaparecidos, otros miles de desplazados, 4 mil niños muertos y 3
mil 700 huérfanos –según cifras de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito
Federal (CDHDF)– y otros tantos miles de menores reclutados por las bandas del
crimen organizado.
Sin
embargo, pese a los reclamos a todos niveles para recomponer esa estrategia ni
Calderón Hinojosa ni García Luna dieron un paso atrás.
Al
contrario, al llamado “súper secretario” se le abrió la cartera como nunca
antes en la historia de México para gastar miles de millones de pesos en su
guerra, incluyendo la difusión de propaganda en medios de comunicación.
Durante
la pasada administración e incluso en la del Presidente Vicente Fox Quesada
–donde Genaro García Luna, se desempeñó como titular de la Agencia Federal de
Investigación (AFI)– se documentaron decenas de yerros y gazapos cometidos por
oficiales de la SSP y el mismo “súper secretario”.
Algunos
de los más sonados fueron, por ejemplo, la liberación en 2005 del entrenador de
futbol Rubén Omar Romano, quien estuvo dos meses secuestrado y que además fue
televisada para explotar el momento mediáticamente.
Otra
más fue el caso de Florence Cassez, a quien a finales de 2005 la AFI capturó
dos veces: la primera, de forma real y la segunda, para mostrarla en televisión
por el Canal 2, el más visto de la empresa Televisa.
El
propio García Luna, tuvo que reconocer el montaje y explicó que la
ciudadana francesa fue capturada antes de la transmisión “en vivo” durante un
noticiero matutino.
Ese
caso provocó un conflicto diplomático entre México y Francia que permanece
vigente y que, ahora, le tocará resolver al Presidente Peña Nieto.
También
se recuerda que en 2008, entre las investigaciones de la Procuraduría General
de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) por el secuestro y asesinato de
Fernando Martí Haik, hijo del empresario Alejandro Martí García, la Secretaría
de Seguridad Pública intentó ocultar que una de las personas que participó en
el plagio era parte de la extinta Agencia Federal de Investigación (AFI): era
Lorena González Hernández, alias “La Lore”, de quien primero se deslindó el
subsecretario de la SSP, Facundo Rosas Rosas y unas horas después, el propio
García Luna, aceptar que la mujer era miembro de la AFI y su plaza estaba
vigente.
Además,
en junio de 2012, en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de
México (AICM) se suscitó un enfrentamiento entre agentes federales; tres
perdieron la vida.
Luego,
la SSP reconoció que los asesinos fueron elementos de la misma corporación
presuntamente coludidos con cárteles del narcotráfico para el trasiego de
cocaína Finalmente, entre muchos otros ejemplos, está el caso Tres Marías,
donde en agosto de 2012, agentes de la Policía Federal dispararon en más de 100
ocasiones contra un vehículo diplomático estadounidense en el poblado de Tres
Marías, en Morelos.
Los
elementos policiacos que participaron en el operativo fueron encarcelados y la
Procuraduría General de la República exhibió la SSP por tratar de
encubrir los hechos.
En
noviembre pasado, Reporte Índigo publicó un reportaje sobre el intocable
secretario de Calderón Hinojosa y donde se consignó que su retiro por la puerta
grande sería a Miami: con empresas, como restaurantes, cafeterías y
consultorías en seguridad, en esa ciudad de Estados Unidos.
Aunque
muchas veces fue citado por diputados, senadores y reconvenido por la Comisión
Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por los abusos de los elementos de la
SSP contra ciudadanos inocentes y por las incongruencias con que se atacó a la
delincuencia organizada, Genaro García Luna, siempre salió ileso de los
embates.
El
30 de noviembre pasado dejó la titularidad de la Secretaría de Seguridad
Pública así como la ejerció: sin dar explicación alguna y sin que hubiera poder
alguno que, en forma legal, lo obligara a dar la cara.