JOSÉ LUIS CORONADO ALVARADO.
LOS CAMINOS DE SEPTIEMBRE…
La educación pública está
siendo atacada en todo el mundo y claro que en respuesta, se han dado protestas
estudiantiles y magisteriales en diversas latitudes entre ellas, Gran Bretaña,
Canadá, Chile, Taiwán y en el caso estadounidense en California, como parte de
la campaña para destruir al que había sido el sistema de enseñanza pública
superior más grande del mundo con el anuncio de congelar las inscripciones la
próxima primavera en la mayoría de los campus y poner en lista de espera a
todos los aspirantes el siguiente otoño, lo que implica el desfinanciamiento
dado por las no asignaciones estatales, con lo que se cubre el presupuesto, de
tal forma que podría haberse acabado la era de universidades públicas
accesibles de cuatro años, fuertemente subsidiadas por el Estado.
Ha habido un cambio de la creencia de que las naciones se benefician de la educación superior a la creencia de que la gente que recibe educación es la más beneficiada y que, por tanto, debería pagar el costo de este beneficio.
Y entonces lo que se da es el fracaso tendencioso y perverso del diseño de esta Política pública que debiera ser de primer orden, lo que preeminencias como un éxito, es simplemente la concentración de riqueza en el uno por ciento de la población mientras la mayoría se ha reducido a un virtual estancamiento o caída, lo que conlleva la vil máxima de Adam Smith...“de todo para nosotros y nada para los demás.
De ahí que los líderes
políticos no apelan por la educación popular porque temen que las naciones se
estén llenando de votantes educados que limiten sus perspectivas y tratan de
desalentar el pensamiento libre e independiente y enseñarles obediencia.
Pero ello ha generado
resistencia, que provoca temores a la élite igual que hace por lo menos 40 años
en que reinaba en los países la liberación de la apatía y desde entonces,
muchas medidas se han tomado para restaurar la disciplina con afán privatizador y ello se refleja en
los drásticos aumentos a las colegiaturas, incluidas de las escuelas públicas
con dobles lenguajes acerca de la gratuidad, con justificaciones meramente
económicas, sin poder de convencimiento, en países ricos y pobres, incluyendo a
México.
Aquí la colegiatura sigue
siendo gratuita, sin serlo realmente,
e incluso han llegado al extremo en nuestro país algunas instituciones
educativas desde el nivel básico al medio superior de plantear el pago
voluntario de estas, en cómodas mensualidades…¡Vaya desfachatez del gobierno de
desentenderse de una obligación constitucional! ¡Vaya apatía del gobernado de
por comodidad o cobardía agachar la cabeza y acatar a pie juntillas los
designios de nuevos tiranos!...
Se esta dando entonces la imposición
de una cultura empresarial de eficiencia, términos económicos que vulneran el
sentido social de una nación.
En palabras de Noam Chomsky,
ese genial norteamericano, la alternativa, debe ser rechazada, pues es la
imagen de vaciar agua en un jarrón –con bastantes fugas- lo que incluye enseñar para exámenes y otros
mecanismos que destruyen el interés de los estudiantes y buscan hacerlos a un
molde fácilmente controlado, como si volviéramos al recipiente vacio que la
educación tiene que llenar pero con la perversidad del fin económico rentable
únicamente para una minoría selecta.
Lo bueno es que iniciamos
con ejemplos de lo que pasa en otros países aunque en el nuestro el Virrey,
sujeto a los poderes facticos de naturaleza económica, este beneficiando solo a
una casta de ladrones que olvidaron que el dinero sirve para hacer política y
que la política no debe servir para hacer dinero…porque simplemente se da el
hurto y si quienes nos gobiernan están dentro de este supuesto…¡El pueblo mas
temprano que tarde hablará! ¡Sin duda muchas más son las interrogantes que se
tienen en la hora actual y muchas mas las definiciones que el gobernado común
habrá de plantear de cara a este dos de septiembre!...
Notamos entonces como se
desdibuja el sentido social del Estado, con actitudes arrogantes de la clase
política que no solo dudaran en desconocer el estado fallido sino que trataran
de envolvernos con sus discursos de siempre para justificar su permanencia en
la escena restándole servicio a la política, generando el estado cínico y
rompiendo equilibrios necesarios mas allá de la encuestitis simplona e incongruente
en que tratan de meternos…¡Imagínese usted a los panistas de cúpula pidiendo
dignificar el salario mínimo y cuando tuvieron oportunidad de hacerlo siendo gobierno
lo regatearon! ¡Vaya falsos apóstoles de una democracia impostada!...
¡Muchas interrogantes…sin
duda en breve las respuestas? ¿Usted qué opina? ¡Hasta la próxima!...