*Peña
y su equipo están conscientes de que Torre es Un Gobernador tóxico y no quieren
contaminarse…
Por:
Mauricio Fernández Díaz
La visita de Peña Nieto a Tamaulipas no es, de
manera alguna, de cortesía política o espaldarazo al huésped de palacio de
Gobierno Egidio Torre Cantú.
Esta visita no trae tranquilidad ni al Gobernador ni
a la clase política que ostenta el poder; Peña Nieto viene a toma posesión del
estado, a dejar en claro de manera diplomática pero muy firme, el hecho de que
la federación, o sea el Presidente, llegan al rescate del Estado ante la
incapacidad y/o complicidad del grupo político en el poder con el CO.
Para Peña Nieto, el venir a Tamaulipas es altamente
tóxico; aparecer a nivel nacional con un Gobernador repudiado por su pueblo,
bajo sospecha de estar involucrado con personajes siniestros, visitar a un
mandatario que en estos 3 años y medio ha hecho pedazos al estado dilapidado
las finanzas sin realizar obra alguna de relevancia, llegar a un estado en el
cual fueron entregadas dolosamente al panismo 6 de las 8 diputaciones federales
y las 2 senadurías justo cuando a Peña más le urgía mayoría para sacar sin
tantos dolores de cabeza las reformas que impulsa el proyecto político de su
partido no es sano y Peña lo sabe…
Muy fresco esta junio del 2012 cuando el candidato
Peña recibió despiadada paliza en Tamaulipas, a tal grado que le gano Josefina
Vázquez Mota quien a la postre quedo en un modesto tercer lugar a nivel
nacional.
La molestia hacia Egidio Torre fue patente; desde el
centro del poder y aun en Tamaulipas muchos columnistas y analistas señalaron a
Egidio Torre como el artífice de esa debacle.
Así, muchos son los agravios escritos en la agenda
estatal contra el Presidente, mismos que van desde el rechazo a su candidatura,
hecho público por parte del Gobernador cuando Peña Nieto buscaba la
presidencia, pasando por las pésimas cuentas entregadas por Torre Cantú en las
elecciones Federales del 2012, cuando los votos fueron encaminados por el
sobrino del Gobernador Carlos Morris (hoy presidente del PRI en Victoria) hacia
los candidatos panistas, mediante la clásica fórmula de cruzar el voto
comprando a los líderes para que votaran por el PAN; varias mantas colocadas en
la frontera por priistas dieron cuenta del acto realizado por Carlos Morris
obedeciendo las órdenes del gobernador.
Y la contienda federal del 2015 parece ir por el
mismo camino; el desastroso gobierno de Egidio, la ausencia de cuadros con
credibilidad entre la población, el hartazgo ante la podredumbre institucional,
la falta de empleo, de seguridad, de salud, de vivienda, de obra pública, de
recursos económicos, de gobernabilidad pone la balanza cargada desde hoy hacia
Acción Nacional, no porque Tamaulipas sea ideológicamente de derecha, ni
tampoco debido a que Acción Nacional cuente con grandes figuras, sino
simplemente porque los tamaulipecos están –perdonaran ustedes esta expresión
pero es la que mejor describe el estado anímico de los ciudadanos- “HASTA LA MADRE DE TANTA COCHINADA”…
Concluyendo; Peña viene a tomar posesión del Estado,
conjuntamente con sus coordinadores de seguridad.
El mando cambio de manos; hoy, desde hoy la
federación se hace cargo, como en Michoacán, de TODOS los aspectos relacionados
con el Gobierno del Estado, el político incluido.
De esto claramente se desprende que los candidatos a
la diputación federal vendrán directamente del centro, palomeados por Peña
Nieto y las campañas estarán supervisadas por personajes de la entera confianza
del Presidente.
Hoy es el día D para el Gobernador; sin duda
recibirá muchas atenciones, muchos apapachos de parte del presidente para
cubrir una realidad que se irá viendo, poco a poco con el paso del tiempo;
Egidio Torre Cantú ya es historia.