“...
SI EL CLIENTE ES UN ‘ENDEJO”…
Por Ramón Durón Ruiz
El viejo Filósofo de Güémez con la bendición que
DIOS le ha dado al gozar de sentido común y una ingenuidad provinciana,
parafrasea esa innata sabiduría llena de humor y picardía del mexicano para
afirmar: “¡Hay abogados que
son como las prostitutas, hay que pagarles por adelantado… y ¡rogarles un ‘ingo
para que se muevan!”…
El refrán popular dice: “De abogados y
enamorados, hay en todos los lados”…Con la sapiencia que da el paso de los
años el político Canadiense Ken Wiebe afirma:
“No todos los abogados son malos, pero el 98% da mala fama al resto”
Es a tal grado que la fama de esta hermosa profesión
llega, que con el paso de los años se afirma: “Un abogado no necesita ser brillante;
sólo requiere sentido común y uñas más o menos limpias”,1 la sabiduría de un proverbio chino lo
dice de otra manera: “Ganar un proceso es adquirir una gallina... y perder
una vaca”…
Hay abogados brillantes para el ejercicio de su
tarea, pero que ignoran los MANDAMIENTOS DEL ABOGADO, del prestigiado
jurisconsulto uruguayo Eduardo Juan Couture Etcheverry “La abogacía es una
lucha de pasiones…Si en cada batalla fueses cargando tu alma de rencor, llegara
un día en que la vida será imposible para ti…Concluido el combate, olvida tan
pronto tu victoria…como tú derrota.”2
Que es un abogado: “Es aquella persona,
licenciada en derecho, un profesional específicamente preparado y especializado
en cuestiones jurídicas, es una persona que puede ofrecer un enfoque adecuado
del problema que tiene el justiciable.”3
Hoy parafraseo una hermosa reflexión: “Abogar exige
raciocinio rápido e inteligencia…Un
refrán popular dicta: “Dime la verdad…que yo mentiré por ti.” Pues
cuenta la historia que en Inglaterra un reo estaba siendo juzgado acusado de un
asesinato…Había evidencias indiscutibles sobre la culpa del reo, sólo había un
pero: ¡el cadáver no aparecía!...
Casi al final de su alegato oral, el abogado,
temeroso de que su cliente fuese condenado, recordó que ‘El derecho se aprende
estudiando y se ejerce pensando’ entonces recurrió a un ingenioso truco:
— Señoras
y señores del jurado, señor juez, tengo una sorpresa para todos, –dijo el jurista, al mismo tiempo que
miraba hacia su reloj– Dentro de
dos minutos, la persona que aquí se presume asesinada, entrará en la sala de
este tribunal.
Entonces miró fijamente hacia la puerta…El jurado y
el juez, sorprendidos, también ansiosos, se quedaron mirando a
la puerta…Transcurrieron dos largos minutos y nada sucedió.
El abogado, entonces finalizó diciendo: —
Realmente, dije eso y todos ustedes miraron hacia la puerta con
la expectativa de ver a la supuesta víctima…En consecuencia una cosa queda
claro: todos tienen dudas en este caso, de que alguien realmente haya
sido asesinado.
Por eso insisto para que ustedes consideren a mi
cliente inocente, (IN DUBIO PRO REO, es la presunción de inocencia, que
significa que cualquier acusado es inocente hasta que alguien demuestre su
culpabilidad).
El jurado y el juez, visiblemente sorprendidos, se
retiraron de la sala para tomar la decisión final…En el fondo recordaban
una frase del derecho que afirma: ‘Fácil es ser bueno…difícil ser justo’…A
los pocos minutos el jurado volvió y pronunció su veredicto: — ¡Culpable!
— ¿Pero
cómo? –Sorprendido preguntó el abogado– yo vi a todos ustedes
mirar fijamente hacia la puerta ¡En conclusión dudaban! Y ante la duda
absuelve…¿Cómo condenan con duda?
El juez aclaró: — Efectivamente todos nosotros
miramos hacia la puerta…¡Menos su cliente!...
La moraleja es formidable: De nada sirve tener
un buen abogado...si el cliente es un ‘endejo.”4
2.
http://estudiojuridicomontenovi.blogspot.mx/2010/04/los-10-mandamientos-del-abogado.html
3 http://www.abogacia.us/abogado/derechos/leyes/que_es_abogado/
4
http://www.bms.mx/chistes/abogar-exige-raciocinio-rapido-e-inteligencia